Ana Botella no parece consciente del ridículo que ha hecho

Mientras los ciudadanos españoles se quieren meter bajo las piedras, plenos de vergüenza ajena, ella aparece radiante sin mostrar ningún tipo de humildad

Ana Botella, hoy, con un desafiante café con leche

Hoy, la alcaldesa de Madrid ha ofrecido en el hotel Ritz un desayuno informativo para explicar sus "logros olímpicos", deseando a los invitados que les hubieran servido un café con leche y afirmando que conoce muy bien el humor español y que ella también se ríe de sí misma.

El problema no es que se ría de sí misma, sino que también se hayan reído de ella todos los habitantes del planeta que vieron la presentación de la candidatura de Madrid a los JJOO 2020 y lo que es peor, que esas mofas se hayan ampliado a todos los españoles. Ana Botella ha hecho el más espantoso de los ridículos y lo ha extendido al resto de sus compatriotas.

Pero no pasa nada. Unas risas con Gallardón y Sáez de Santamaría tras la rueda de prensa, que incluso le habrán dicho que ha estado muy graciosa y "aquí no ha pasado nada". Para ellos, claro. Porque a los demás españoles nos ha convertido en la chanza mundial de la incompetencia y de la chapuza.

Maravilloso todo ello para ese invento de García Margallo de la "marca España", que con esta imagen va a quedar registrada junto a las de "Pompoff y Teddy", "Gabi, Fofó y Miliki" y "Los Chiripitifláuticos", entre otros payasos.

Pericles, 12/09/2013